Adicciones digitales, la tecnología mal utilizada
Las adicciones digitales plantean la paradoja de que algo útil y beneficioso llegue a convertirse en un serio problema personal, familiar, profesional y de salud.
Nunca te has preguntado:
¿Dónde está el límite entre el uso, el abuso y la adicción?
¿Es normal y sano cómo usa mi hijo la tecnología?
¿Cómo puedo limitar el acceso a la pornografía y otros contenidos inadecuados para mi hijo?
¿Qué relación hay entre la hiperactividad y la tecnología?
¿Puedo evitar que mi hija se convierta en anoréxica o bulímica por culpa de Internet?
¿Cuál es la regla de oro para evitar las adicciones digitales?
¿Existen realmente las adicciones digitales?
¿Qué son las adicciones digitales? Para los especialistas en el tema de las adicciones, estamos ante uno de los trastornos adictivos más recientes, ya que se trata de un uso descontrolado de la tecnología, lo que genera una conducta excesiva, en general, las adicciones digitales afectan mayoritariamente en los jóvenes, por la adicción al teléfono móvil, las Redes Sociales o al mp3.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), la adicción es una enfermedad mental, de esta forma, para centrar la cuestión de las adicciones digitales en general, y de Internet en particular, se debe atender a criterios psicológicos, cuando una persona manifiesta un uso excesivo y problemático de Internet, se trata de una dependencia; en contra parte, algo que es útil, beneficioso y placentero llega a convertirse en un serio problema personal, familiar, profesional y hasta de salud.
Recientes estudios de investigación consideran, la existencia de conductas adictivas que no implican necesariamente el consumo de sustancias, los estudios realizados revelan que un gran porcentaje de adolescentes presentan adicciones digitales (dependencia de Internet, del móvil y los videojuegos)
¿Cuando se puede diagnosticar que una persona sufre de adicción digital?
Los principales síntomas de la adicción a Internet son los siguientes:
- Pérdida de control sobre el uso de Internet, que provoca, a su vez, un aumento significativo de la frecuencia de conexiones, cantidad de tiempo dedicado, que recuerda al fenómeno de tolerancia en el caso de la dependencia de sustancias.
- Malestar clínicamente significativo ante la imposibilidad de conectarse a Internet o cuando se lleva un tiempo sin hacerlo, lo cual es un ejemplo de síndrome de abstinencia.
- Empleo de excesivo tiempo en actividades relacionadas con Internet.
- Se dejan de hacer otras actividades por conectarse a Internet, como por ejemplo quedar con los amigos, pasar tiempo con la familia u otras actividades de ocio (leer, escuchar música, hacer deporte, etc.)
Haz tu Diagnóstico
Mira estas preguntas. Si respondes afirmativamente a varias de ellas deberías empezar a pensar que quizá necesites ayuda.
- ¿Estás pendiente constantemente de tu Twiter y tu Facebook?
- ¿Pasas mucho tiempo solo en la habitación?
- ¿Te aíslas constantemente del resto de tus amigos y familia?
- ¿Quieres estar siempre solo y que te dejen en paz?
- ¿Has dejado de salir a la calle a jugar con tus amigos?
- ¿Has cambiado a tus amigos de siempre por otros virtuales a los que no conoces personalmente?
- ¿Te ha cambiado el carácter?
- ¿Te enfadas si te dicen que apagues la computadora?
- ¿Te llevas el celular por la noche a la cama y lo tienes en la mano?
- ¿Pones como excusa que lo utilizas como despertador?
- ¿Llevas muchas horas enganchado al celular, a videojuegos o conectado a Internet?
- ¿Utilizas el MP3, MP4 o MP5 hasta la puerta de clase?
- ¿Llevas puesta la música demasiado alta?
- ¿Ha bajado tu rendimiento escolar?
- ¿Pasas más de media hora al día chateando con los amigos o desconocidos?
- ¿Conoces personalmente a todos los amigos que tienes en tu Twiter y/o Facebook?
- ¿Intentas que tus padres no sepan lo que haces con la cxomputadora?
- ¿Compras por Internet sin pedir permiso?
- ¿Estás más delgado o más gordo porque te pasas todo el día sentado frente a la computadora?
- ¿Has visitado alguna web o blog que promocione la bulimia y la anorexia?
- ¿No preguntas cuando tiene dudas y ves algo raro en Internet?
- ¿Tienes un comportamiento diferente cuando estás utilizando la computadora y cuando sales a la calle?
- ¿Insultas a gente a través de tus redes sociales pensando que no tendrá trascendencia?
- ¿Te notas cansado cuando te levantas por la mañana?
- ¿Sientes ansiedad cuando no te hace una llamada perdida alguno de tus amigos de madrugada?
- ¿Sientes la necesidad de tener que usar constantemente la computadora y no poder ir a ningún sitio (de vacaciones, fin de semana,…) sin usarla ningún día?
- ¿Necesitas llevar el celular a cualquier parte? ¿Qué pasa si un día (que por supuesto no lo necesitas porque no es necesario ni para trabajar ni nada) se te olvida?
¿Cómo afecta a nuestra salud?
La adicción a Internet es el tipo de adicción digital sobre la que se tiene mayor información e investigación y sobre la que se ha alcanzado un mayor consenso acerca de su forma como trastorno por dependencia.
El sector de la población con mayor riesgo son los adolescentes, esto debido a que tienen en las redes sociales los mejores recursos para ampliar sus relaciones interpersonales y resolver (o complicar) sus relaciones afectivas.
Conforme se van desarrollando nuevas tecnologías y aparecen más funciones que son usadas por los adolescentes de manera universal, hay un pequeño porcentaje que puede tener problemas de abuso y dependencia, desgraciadamente es difícil dar una cifra de afectados porque aún se están desarrollando elementos de diagnóstico.
Las adicciones digitales no tienen la misma gravedad que otras adicciones afirma este profesor de psicología, sin embargo pueden llegar a convertirse en una patología, la persona necesita más, no es capaz de dejarlo e interrumpir esta actividad le genera molestias y ansiedad, lo más parecido a tener un “síndrome de abstinencia”.
¿Existe algún tratamiento?
Los expertos en esta materia han adecuado protocolos de tratamiento aplicados a otras adicciones para adaptarlos al tratamiento de personas que desean superar una adicción digital; el objetivo es que la persona pueda usar la tecnología pero de una forma controlada.
Al inicio del tratamiento, hay que reducir el tiempo y la necesidad de uso, con técnicas de control y actividades alternativas a Internet, posteriormente, hay que enseñar y practicar un uso racional de Internet y redes sociales, y por último prevenir las recaídas, siempre bajo la vigilancia de un experto.
Para el tratamiento de las adicciones digitales es esencial el papel de la familia, afirman los estudiosos del tema, ya que los padres con las indicaciones dadas por el terapeuta, son un gran apoyo para superar estas adicciones.
¿Se pueden prevenir las adicciones tecnológicas?
La mejor opción es la de crear programas de prevención en las escuelas; también es de vital importancia el papel que juegan los padres en la prevención de los problemas derivados del uso inadecuado de las nuevas tecnologías; los padres son quienes deben vigilar su uso, establecer límites y normas de utilización, y pueden detectar a tiempo futuros problemas, hay que recordar que no se puede prohibir su uso, ya que la vida cotidiana actualmente se basa en el uso de esta tecnologías, y cada vez dependemos más de ellas.
Las personas que se encuentran en esta situación, se sienten completamente cómodos al utilizar estas tecnologías y totalmente incómodos cuando no tienen cerca una conexión a Internet, videojuego o cualquier otra aplicación, de todas ellas, el móvil sigue siendo el número uno; lo utilizan para mandar mensajes o fotos, descargar archivos, hacer llamadas perdidas, dar toques a sus amigos y otras muchas cosas; para todo menos para hablar.
Los adolescentes no saben distinguir entre la realidad de la vida y la realidad digital, y esa debe ser la labor de los padres., hacerles ver las ventajas e inconvenientes de utilizar toda esta tecnología, pero en la mayoría de los casos el problema es que a los padres todo esto les supera.
¿Pero que pasa cuando la adicción la sufren los padres?
En este caso de poco sirve hablarle a un hijo del uso del móvil y variantes de comunicación multimedia y red social, si los adictos son los padres; por lo que hay que revisar la adicción de los padres al uso de estas nuevas tecnologías, mucho de ello basado en la soledad, al que el ritmo de vida actual nos orilla, desgraciadamente contra la soledad solo se puede actuar a través de la comunicación y la integración de las familias, ya que lo ideal es que la persona que se encuentra en esta situación pida ayuda, pero cuando esto no sucede, los integrantes de la familia deberán estar alertas a los síntomas y procurar esa ayuda; esto no es sencillo, ya que la persona que lo padece le cuesta reconocer que se encuentra sola, únicamente se reconoce en la intimidad. Implica confesar cierto fracaso.
Por último, es importante destacar que hay diferencias entre uso, abuso y adicción, y solo quedarnos con el primero.
En cualquiera de estos casos le recomendamos consultar con su médico, terapeuta u otro profesional de la salud competente. La información contenida en este artículo tiene una función meramente informativa, y tiene como objetivo alertarnos de una nueva adición que no todos detectamos y estamos concientes; ya que si bien las nuevas tecnologías se desarrollan para beneficiarnos, el uso inadecuado y el abuso nos pueden dañar.
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